Fuente de vida y desarrollo para la presente y futuras generaciones
Esta reserva forma parte de una cadena montañosa que ocupa parte de cinco departamentos de Guatemala: Alta Verapaz, Baja Verapaz, El Progreso, Zacapa e Izabal, ubicada en el nororiente de Guatemala, entre los valles del río Polochic y el río Motagua. Ocupa un área de 242,642 hectáreas de extensión. En un recorrido de Este a Oeste, se extiende en aproximadamente 130 kilómetros de longitud y varía entre 10 y 30 kilómetros de ancho, con elevaciones desde el nivel del mar, hasta los 3,015 metros sobre el nivel del mar. Estas condiciones han propiciado el desarrollo de microclimas, que, a su vez, han dado paso a hábitats únicos, ricos y diversos que han fomentado el endemismo de especies de flora y fauna únicos para la región.
El objetivo de la RBSM es el fomento de la conservación y protección de los ecosistemas, así como los bienes y recursos que nos proveen, aprendizaje sobre el uso sostenible de los recursos naturales, el conocimiento ancestral y tradicional y de la investigación científica vinculada a la diversidad biológica resguardada en la misma. No sólo tiene una riqueza natural y cultural incalculable, sino que provee agua a través de 294 cuerpos hídricos que abastecen las cuencas de Polochic y Motagua. Ha sido cuna de nuestra cultura, por lo que es fundamental para la identidad guatemalteca. Por esta razón, es un crítico patrimonio natural y cultural tanto de la generación presente como de las futuras.
Por estas razones, Guatemala entró como miembro del programa de UNESCO “El Hombre y la Biosfera” con la declaratoria de Sierra de las Minas como área protegida en 1990. Posteriormente le siguieron Reserva de la Biosfera El Trifinio y Reserva de Biosfera Maya, reconociéndose tres de cinco reservas de la biosfera legalmente declaradas a nivel nacional. Este programa reconoce a las áreas que no sólo sostienen procesos naturales y culturales locales, sino que son pivotantes para los procesos ecológicos y culturales mundiales.
La RBSM está legalmente registrada en el Sistema Guatemalteco de Áreas Protegidas- SIGAP-, el cual abarca actualmente alrededor del 32% del territorio nacional. Este sistema alberga 7 de 13 zonas de vida, además de una parte considerable de su patrimonio cultural (histórico y arqueológico), atributos que son resguardados bajo normativas vigentes y modalidades de conservación por medio de categorías de manejo previamente establecidas y a cargo del CONAP.
El CONAP como ente rector de la conservación, la protección y el uso sostenible de la diversidad biológica y las áreas protegidas del país, resalta la importancia de estos ecosistemas y el trabajo coordinado con los administradores y coadministradores, comunidades y otras entidades de la sociedad civil y del gobierno.
Un ejemplo de ello es el compromiso de la Fundación Defensores de la Naturaleza, quienes administran de forma conjunta con el CONAP esta importante área protegida, la Reserva de Biosfera Sierra de las Minas -RBSM-.
La reserva cuenta con tres estaciones meteorológicas automatizadas, una en cada distrito, que registran parámetros de temperatura, humedad relativa, viento y precipitación. Además se cuenta con seis estaciones meteorológicas tipo C, dos en cada distrito. Para protección y control de la reserva se cuenta con ocho torres de vigilancia, principalmente para incendios forestales.
También cuenta con la Estación Científica La Cabaña, se encuentra ubicada en el bosque nuboso, en el área de Los Albores. Fue creada para apoyar la investigación científica, el manejo del área y el ecoturismo. Tiene capacidad de hospedaje para 25 personas, un área de trabajo y cuenta con los servicios básicos. Adicionalmente, se cuenta con siete refugios para facilitar las actividades de investigación, monitoreo y protección, sus construcciones son rústicas y pequeñas, de manera que no generan ningún impacto negativo en el entorno.
La cantidad y características de la lluvia en las partes altas varían mucho en distancias muy cortas. La precipitación se estima entre los 700 y 3,000 mm. anuales. La condensación de agua en la vegetación de los bosques nubosos alimenta a los ríos, también durante los meses de baja precipitación. La depresión oeste-este de la Sierra de las Minas, juega un papel muy importante en el patrón de precipitación del Valle del Motagua. Las cordilleras altas crean condiciones de sombra de lluvia, lo que repercute que en el valle medio del Motagua se reporte una precipitación anual de menos de 500 mm, siendo entonces el valle más árido y seco de Centro América.
El abastecimiento de agua a las poblaciones es de vital importancia, puesto que de las 14 municipalidades que conforman la Sierra de las Minas, 8 de ellas dependen del agua de la Sierra para ser distribuida para uso domiciliar. El agua de las Sierra de las Minas tiene un gran valor económico, principalmente en el Valle del Motagua, en donde existen 64 agroindustrias que la utilizan.
Las áreas protegidas proveen bienes y servicios esenciales para la población, como agua, oxigeno, alimentos, medicinas, materia prima entre otros.
Fuente de vida y desarrollo para la presente y futuras generaciones
Esta reserva forma parte de una cadena montañosa que ocupa parte de cinco departamentos de Guatemala: Alta Verapaz, Baja Verapaz, El Progreso, Zacapa e Izabal, ubicada en el nororiente de Guatemala, entre los valles del río Polochic y el río Motagua. Ocupa un área de 242,642 hectáreas de extensión. En un recorrido de Este a Oeste, se extiende en aproximadamente 130 kilómetros de longitud y varía entre 10 y 30 kilómetros de ancho, con elevaciones desde el nivel del mar, hasta los 3,015 metros sobre el nivel del mar. Estas condiciones han propiciado el desarrollo de microclimas, que, a su vez, han dado paso a hábitats únicos, ricos y diversos que han fomentado el endemismo de especies de flora y fauna únicos para la región.
El objetivo de la RBSM es el fomento de la conservación y protección de los ecosistemas, así como los bienes y recursos que nos proveen, aprendizaje sobre el uso sostenible de los recursos naturales, el conocimiento ancestral y tradicional y de la investigación científica vinculada a la diversidad biológica resguardada en la misma. No sólo tiene una riqueza natural y cultural incalculable, sino que provee agua a través de 294 cuerpos hídricos que abastecen las cuencas de Polochic y Motagua. Ha sido cuna de nuestra cultura, por lo que es fundamental para la identidad guatemalteca. Por esta razón, es un crítico patrimonio natural y cultural tanto de la generación presente como de las futuras.
Por estas razones, Guatemala entró como miembro del programa de UNESCO “El Hombre y la Biosfera” con la declaratoria de Sierra de las Minas como área protegida en 1990. Posteriormente le siguieron Reserva de la Biosfera El Trifinio y Reserva de Biosfera Maya, reconociéndose tres de cinco reservas de la biosfera legalmente declaradas a nivel nacional. Este programa reconoce a las áreas que no sólo sostienen procesos naturales y culturales locales, sino que son pivotantes para los procesos ecológicos y culturales mundiales.
La RBSM está legalmente registrada en el Sistema Guatemalteco de Áreas Protegidas- SIGAP-, el cual abarca actualmente alrededor del 32% del territorio nacional. Este sistema alberga 7 de 13 zonas de vida, además de una parte considerable de su patrimonio cultural (histórico y arqueológico), atributos que son resguardados bajo normativas vigentes y modalidades de conservación por medio de categorías de manejo previamente establecidas y a cargo del CONAP.
El CONAP como ente rector de la conservación, la protección y el uso sostenible de la diversidad biológica y las áreas protegidas del país, resalta la importancia de estos ecosistemas y el trabajo coordinado con los administradores y coadministradores, comunidades y otras entidades de la sociedad civil y del gobierno.
Un ejemplo de ello es el compromiso de la Fundación Defensores de la Naturaleza, quienes administran de forma conjunta con el CONAP esta importante área protegida, la Reserva de Biosfera Sierra de las Minas -RBSM-.
La reserva cuenta con tres estaciones meteorológicas automatizadas, una en cada distrito, que registran parámetros de temperatura, humedad relativa, viento y precipitación. Además se cuenta con seis estaciones meteorológicas tipo C, dos en cada distrito. Para protección y control de la reserva se cuenta con ocho torres de vigilancia, principalmente para incendios forestales.
También cuenta con la Estación Científica La Cabaña, se encuentra ubicada en el bosque nuboso, en el área de Los Albores. Fue creada para apoyar la investigación científica, el manejo del área y el ecoturismo. Tiene capacidad de hospedaje para 25 personas, un área de trabajo y cuenta con los servicios básicos. Adicionalmente, se cuenta con siete refugios para facilitar las actividades de investigación, monitoreo y protección, sus construcciones son rústicas y pequeñas, de manera que no generan ningún impacto negativo en el entorno.
La cantidad y características de la lluvia en las partes altas varían mucho en distancias muy cortas. La precipitación se estima entre los 700 y 3,000 mm. anuales. La condensación de agua en la vegetación de los bosques nubosos alimenta a los ríos, también durante los meses de baja precipitación. La depresión oeste-este de la Sierra de las Minas, juega un papel muy importante en el patrón de precipitación del Valle del Motagua. Las cordilleras altas crean condiciones de sombra de lluvia, lo que repercute que en el valle medio del Motagua se reporte una precipitación anual de menos de 500 mm, siendo entonces el valle más árido y seco de Centro América.
El abastecimiento de agua a las poblaciones es de vital importancia, puesto que de las 14 municipalidades que conforman la Sierra de las Minas, 8 de ellas dependen del agua de la Sierra para ser distribuida para uso domiciliar. El agua de las Sierra de las Minas tiene un gran valor económico, principalmente en el Valle del Motagua, en donde existen 64 agroindustrias que la utilizan.
Las áreas protegidas proveen bienes y servicios esenciales para la población, como agua, oxigeno, alimentos, medicinas, materia prima entre otros.
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Guatemala, 4 de octubre del 2022.
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